Nadia Mejía e Iván Farah disfrutan encebollado en Guayaquil

La magia del certamen se mezcla con la vida cotidiana. El martes 12 de agosto, Nadia Mejía, recién coronada Miss Universo Ecuador 2025, protagonizó un momento espontáneo y cercano junto al influencer Iván Farah, quienes compartieron un encebollado tradicional sentados en plena vereda, reflejo de su conexión con la identidad guayaquileña.

Nacida y criada en Estados Unidos, pero de raíces guayaquileñas por parte de su padre, el artista Gerardo Mejía, Nadia ha buscado acercarse a la cultura popular desde el inicio de su reinado.

Con vestido, tacones y corona, la belleza preguntó con simpatía: “¿Dónde está mi encebollado?”, mientras Iván le respondía sonriente. La escena se complementó con chifles, que llegaron justo a tiempo para acompañar el plato.

Lejos de los protocolos, la instantánea sugiere una nueva faceta de Mejía: accesible, auténtica y orgullosa de sus raíces.

El encebollado —caldo de pescado preparado con yuca, tomate, cebolla encurtida y especias— no solo es un plato icónico de la costa ecuatoriana, sino que, desde julio de 2024, fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial del país.

Este reconocimiento subraya el poder simbólico de la escena: una reina al alcance del sentir popular. Así, más que una imagen de realeza, se reafirma una reina guayaquileña que elige el calor de lo auténtico para conectar con su gente.